“The Desolation of Smaug representa , sin duda, una notable mejora sobre los problemas que amplios sectores de la crítica y la audiencia señalaron en la entrega anterior de The Hobbit, que hubieran quedado olvidadas, y recapturado algo de la vieja magia si hubieran sido únicamente dos partes, como estaba programado, lo que hace que Smaug sufra de una terrible intransigencia que la hace ser no más que un puente narrativo, una aventura muy disfrutable el cruzarlo, pero al que difícilmente voltearemos a ver de nuevo en nuestra ruta al final. Dejad que los productores se inunden de oro, cuales bestias que escupen fuego.” Así calificamos la segunda parte de El Hobbit durante su estreno en enero.
La última década de trabajo de Peter Jackson ha estado marcada por la cantidad de horas que el director nos tiene sentados viendo cada una de sus películas y las horas posteriores que gastamos revisando los extras de cada una de ellas. Por ejemplo El Hobbit: La desolación de Smaug tiene casi media hora más a su corrida original de casi tres horas gracias a un video que contiene las escenas eliminadas de la cinta. Es un trabajo sólo para fanáticos, lo pueden ver a continuación:
