‘Pacto criminal’: Anécdota de gángster

Criminales abundan por doquier. Pocos logran traspasar la memoria del colectivo público más allá de su centro de operaciones sin importar su localidad y su modus vivendi. La historia del siglo XX ha ofrecido nombres de gángsters estadunidenses como Frank Costello y John Gotti. Algunos más han encontrado al cine como el vehículo para encontrar un pedazo de retrato de sus turbulentas y clandestinas vidas e imperios, como el Al Capone de Robert De Niro en Los Intocables (The Untochaubles, 1987), la familia Lucchese bajo la visión de Martin Scorsese en Buenos muchachos (Goodfellas, 1990) o el Benjamin “Lefty” Ruggiero de Al Pacino en Donnie Brasco (1997). 

Pacto criminal (Black Mass, 2015) es la retrospectiva al paulatino ascenso de Jimmy “Whitey” Bulger (Johnny Depp) durante la década de los setenta como uno de los mafiosos más poderosos en la historia de Boston. De ascendencia irlandesa y líder de la pandilla “Winter Hill”, Bulger aceptó una alianza ofrecida por el agente del FBI John Connolly (Joel Edgerton) para acabar con el vestigio de la mafia italiana local y logró consolidar un poder que le permitió eludir a la ley, amasar una fortuna con diversos negocios ilícitos y de paso ejercer una espiral de violencia.

El realizador Scott Cooper (Loco corazón, Out of the Furnace) utiliza el punto de vista de los informantes a modo de flashback como uno de los recursos para dar un toque de intimidad a la historia gangsteril. En la frialdad y la oscuridad del relato, de poco en poco se asoma la personalidad de Bulger, un hombre que a raíz de su tiempo en prisión en Alcatraz desconfía de sus propios compinches e irradia intimidación en todo aquel que lo decepciona, pero despliega un ápice de humanidad a través de la familia, en particular su hermano, el apoderado político Billy (Benedict Cumberbatch), y de su propio hijo pequeño.

El ascenso de Jimmy ofrece unas dignas escenas que reiteran la ambigüedad moral característica de los filmes de gángsters: la inclemencia a favor de los fines personales, afianzando de esta manera una rectitud tan grande en tono y ejecución por parte de Cooper, que es incapaz de ofrecer algún tipo de innovación o profundidad en la red de corrupción y crímenes. 

No obstante, los lazos de lealtad son importantes en la trama, en especial entre los hermanos Bulger y Connolly, atribuido a la infancia en la que crecieron juntos, detonando la suma de acontecimientos que afianzarán a Jimmy como un prominente y peligroso mafioso, utilizando a la propia “alianza” para sus funestos propósitos. Johnny Depp se zafa de la caricatura de Mortdecai (2015) y de los repetitivos ademanes de Jack Sparrow y el Sombrerero Loco para ofrecer uno de sus mejores papeles en mucho tiempo, recreando al oscuro mafioso que oscila entre la violencia, la frialdad y los instantes de ternura. 

Si bien los dos lados de la ley recorren una sutil transición a causa de la pérdida (Jimmy) y de la caída a las tentaciones de la corrupción y el poder (Connolly), el resto de los personajes son incapaces de trascender o de adquirir una profundidad meritoria, desde los integrantes del Departamento de Boston, los criminales aliados, y el propio Billy que sólo funge como “el hermano político” de Jimmy, hasta las mujeres relegadas a esposas que desaparecen de la trama sin una justificación lo suficientemente explicada. Así, la mayoría de ellos otorgan breves apariciones que terminan en la anécdota criminalística, sin jamás ahondar lo suficiente en su progreso y con algunos acontecimientos que entorpecen el relato. Aunado a ello, el viaje en el tiempo dentro del ascenso y caída se torna lento en ritmo y confuso por la falta de envejecimiento y de diferenciación entre las décadas en las que se desarrolla.

Como resultado, Pacto criminal es una pausada y densa odisea de criminalidad, correcta en su ejecución, pero un poco superficial en su tratamiento que depende en gran medida del destacado desempeño del elenco. Si no fuera por Johnny Depp, el idilio entre gángsteres y policías sucumbiría al olvido.

Por Mariana Fernández (@mariana_ferfab)

    Related Posts

    Fantastic Fest 2018: ‘Suspiria’ de Luca Guadagnino
    ‘Cincuenta sombras más oscuras’ y más ridículas
    ‘Doctor Strange: Hechicero supremo’: El viejo truco del nuevo mago
    Primer adelanto de ‘Piratas del Caribe: La venganza de Salazar’
    Primer tráiler de ‘Cincuenta sombras más oscuras’
    Cinema Móvil Presenta: ‘Alicia a través del espejo’