Conmovedora, explícita, sensible, pornográfica son sólo algunos de los adjetivos que ha recibido La vie d’Adele (Blue is the Warmest Color/La vida de Adele) de Abdellatif Kechiche. El director narra el despertar sexual de una adolescente francesa y su tórrido romance con una estudiante de arte, en lo que ya es llamado uno de los mejores filmes que se han presentado en la edición 66 de Cannes. A pesar de eso, algunos apuntan que será difícil que la película encuentre distribución internacional por lo gráfico de sus escenas sexuales, aunque sin duda encontrará un nicho en salas de arte. El resumen de las reacciones a continuación:
Justin Chang de Variety dijo: “Es una simple e incluso predecible historia, sin embargo texturizada tan exquisitamente y actuada de manera tan poderosa que se siente reveladora. Siempre persuasiva como un onírico objeto del deseo, Seydoux sorprende con la profundidad de su control; tiene momentos de impactante ferocidad aquí, revelando Emma como una persona generosa, abierta, cuya dura y crítica racha es inseparable de su temperamento artístico. Pero la película le pertenece a Exarchopoulos, completamente inhabitando un rol apropiadamente llamado igual a la actriz; con su ronca voz y dulce sonrisa, interpreta virtualmente cada emoción que un director puede pedirle a una actriz, dirigiendo la atención y simpatía del espectador cada minuto.” La nota íntegra aquí.
Diego Lerer de Otros Cines apuntó: “Kechiche hace una radiografía emocional de Adele, poniendo la cámara encima de su rostro hasta captar su saliva cuando come, sus mocos cuando llora, lágrimas, ojos llorosos y transpiración como si estuviera a 5 centímetros de su alma. Y cuando llegan las escenas de sexo, la cercanía será igual. En un grupo de escenas de sexo que podrían contarse entre las mejores jamás filmadas en el cine convencional (no hablemos de porno ni nada de eso), Kechiche nos pone al espectador como terceros en la intimidad entre chica y chico, al principio, pero más que nada entre las dos mujeres protagonistas, en escenas muy largas que fascinarán a algunos y probablemente incomoden a otros…” El artículo entero acá.
Christophe Narbone de Premiere, Francia comentó: “Tres horas de mise en scene pura en la cual el corazón de la heroína del título es perseguido por las fuerzas telúricas del amor y de una homosexualidad difícil de asumir. El dispositivo del cineasta es siempre el mismo: una sucesión de momentos de la vida capturados por una cámara unida a los cuerpos y las miradas que no engañan… Nos recuerda a Eustache, Garrel, Pialat, a todos aquellos cineastas del existencialismo espléndido, de la intoxicación y de la violencia de los sentimientos, a aquellos formidables directores de actores que elevan a los mismos a los terrenos de juegos resbaladizos o donde la frontera entre realidad y ficción es abolida.” El texto completo aquí.
Jordan Mintzer de THR aseguró: “Con cuatro editores con crédito (incluyendo a la coguionista Lacroix) dandole forma en un trabajable todo, el ritmo y las actuaciones nunca se detienen a pesar del tiempo total, mientras la historia pareciera que podría seguir por siempre. Tal vez ésa era la intención de Kechiche con el final abierto de este título francés, aunque, como lo sugiera la emocionante secuencia final, este capitulo en la vida de Adele está definitivamente cerrado.” La crítica íntegra acá.
