Stanley Kubrick era un perfeccionista, si obsesión por los detalles es legendaria. Cuando otros directores dejan las decisiones de mercadotecnia en el departamento correspondiente y dedican sus esfuerzos sólo al trabajo fílmico, Kubrick tenía injerencia en todos los aspectos que rodeaban a sus películas, sin importar lo triviales que fueran.
Para El resplandor (The Shining, 1980) el cineasta de origen inglés contrató al inolvidable Saul Bass para diseñar el poster de la película, ya habían trabajado juntos con los storyboards de Espartaco (Spartacus, 1960). El trabajo que llegó a las salas de cine es aquel con un fondo amarillo y un rostro entre las letras del titulo, sin embargo no fue la primera idea de Bass. A continuación les compartimos varias opciones que se quedaron en el tintero, incluyendo un laberinto, una mano con un triciclo, una familia en la nieve y un par más, algunas vienen acompañadas de comentarios de Kubrick explicando su desagrado por ellas.
Esperamos sus comentarios, ¿les gusta más el definitivo o prefieren algún otro?
Vía The Film Stage.
