Hace un par de meses comenzamos a preguntarnos cuándo veríamos el trabajo más reciente de Andrzej Żuławski detrás de la cámara, Cosmos. Ahora sabemos que no veremos más surgir de la mente del cineasta polaco. El realizador falleció la madrugada de hoy rodeado de sus seres queridos después de batallar durante meses con el cáncer que lo aquejaba. El hombre que había dejado de filmar porque era feliz se despidió del mundo.
Justo, ayer por la noche, noticias sobre su decaído estado de salud habían comenzado a circular por la red:
It’s with absolute heartbreak that we share this sad news. Earlier today Andrzej’s son, filmmaker Xawery Zulawski shared…
Posted by Andrzej Zulawski on martes, 16 de febrero de 2016
La obra más conocida de Żuławski, La posesión (Possession, 1981), es la cabeza de un cuerpo fílmico que escapa constantemente de la clasificación y está en permanente evolución. De ella escribimos: “El horror más grande no se oculta detrás de una enorme bestia o desastre natural, sino en los recovecos de la intimidad. Isabelle Adjani y Sam Neill son una pareja que atraviesa por una fuerte crisis de pareja en la que la mujer somatiza de manera grotescamente gráfica el malestar psicológico que generan la infidelidad, los celos y la desconfianza. Posesión es hacer tangible el infierno personal que se atraviesa, los inmensos horrores que viven dentro de cada uno. La escena de Adjani recorriendo amplios pasillos del metro vomitando y gritando es una sublime pieza de terror doméstico.”
Aunque no es la única película de interés firmada por el director: Lo importante es amar (L’important c’est d’aimer, 1975), La mujer pública (La femme publique, 1984), El diablo (Diabel, 1972), On The Silver Globe (Na srebrnym globie, 1988), son de vital importancia para comprender el mundo como lo veía Andrzej Żuławski.
Sin duda extrañaremos a una de las voces más particulares que ha dado el cine y a uno de los últimos grandes maestros de Europa del Este. Descanse en paz Andrzej Żuławski.