El gran talento de David Fincher es crear imágenes. Podrá fallarle el drama de cuando en cuando con construcciones de carácter vacías o anécdotas predecibles, pero cuando funciona sólo hay una cosa mejor que la historia y eso es su cinematografía. Precisa, oscura y sencillamente hermosa, la imaginería de Fincher es la razón para ver sus películas menos memorables y para disfrutar aun más sus triunfos. Por ello, el usuario de Vimeo Artem Chudinov hizo un extraordinario montaje donde localiza las imágenes recurrentes en la carrera del director desde 1993 hasta 2011. Trackings, dollies, violencia, sangre, todo lo que esperaría ver un admirador de Fincher está ahí, así que échenle un ojo.