James Broughton es considerado una de los cineastas experimentales claves de los años 60 a pesar de que su obra siempre ha estado en el margen. El documental Big Joy: Las aventuras de James Broughton (Big Joy: The Adventures of James Broughton, 2013) busca acercar la obra de este artista y celebrar su vida, la cinta formará parte de la programación de la Cineteca Nacional a partir del próximo 8 de agosto y el 14 del mismo mes en el Cine Tonalá.
El trabajo dirigido por Eric Slade y Stephen Silha y producido por un equipo multicultural, incluyendo al mexicano Max St Romain, es una gran oportunidad para empaparse del espíritu de liberación sexual de los años 60. A continuación les dejamos el trailer y la sinopsis de la película:
Sinopsis: Big Joy: Las aventuras de James Broughton es un documental que celebra la vida y obra de un artista que quizás pocos reconozcan hoy, pero en su momento fue una de las voces que definieron un pasaje en la historia de las artes en EUA, y muy influyente en el movimiento de liberación sexual de los 60s. Broughton se le considera el padrino de el arte independiente, y de la sexualidad en el cine.
Él siempre fue un poeta de oficio, pero al descubrir su habilidad como cineasta, se convirtió en uno de los pioneros del cine experimental desde los años 30s en California. En sus 85 años de vida, escribió 23 libros y realizó 23 películas. Más allá de su legado artísico, Broughton fue un personaje muy colorido y excéntrico que vivió su vida intensamente, y sin censura. A lo largo de su trayecto, no se aferró a una orientación sexual; tuvo importantes relaciones con mujeres, con hombres, tuvo 3 hijos, y encuentra al amor de su vida a los 65 años de edad. Broughton juega un importante papel en el movimiento hippie. Sus películas celebran el cuerpo y la sexualidad en todas sus formas. Con el tiempo, su actitud se torna en filosofía de vida, y él en líder espiritual.
Sin embargo, toda esta “gran dicha” no vino sin costo. Él manifestaba un lado oscuro que viene desde la infancia. Broughton sufrió terrible rechazo, depresión, y auto-desprecio que vivían dentro de él, debajo de su fachada alegre. Durante sus primeras tres décadas, contemplaba el suicidio con frecuencia. Él afirma que el cine le salvó la vida. El precio que pagó por vivir su verdad fue alto, y causó mucho daño en su camino. Big Joy está contada a través de entrevistas, narraciones, animación digital, y material de archivo de la obra del artista.
