El año pasado, Trent Reznor y Atticus Ross fueron galardonados con la estatuilla Oscar por su colaboración en la banda sonora de La Red Social, (The Social Network, 2010) dirigida por David Fincher y aclamada por distintos sectores de la crítica cinematográfica. La música de Reznor y Ross, sin duda, fue uno de los factores primordiales para que esta cinta lograra el éxito obtenido.

A finales del 2011 fue estrenado el filme La Chica Del Dragón Tatuado (The Girl With The Dragon Tatoo) igualmente dirigida por Fincher, quien volvió a confiar la música de su largometraje a la dupla de Reznor-Ross, quienes de nuevo afirman su fortaleza como pareja creativa en scores fílmicos y nos brindan un material un tanto más complejo y barroco a comparación de la música escrita para La Red Social.

Con un total de 39 tracks, Reznor y Ross no se despegan de la línea sonora que fundaron en su colaboración anterior, sin embargo, sí acentúan mucho más tonalidades distorsionadas y disonantes que dan paso a esas sensaciones frías y tensas con envolventes industriales que son la esencia principal en toda la música que Reznor ha realizado.

La estética de este filme junto a la colaboración de estos dos músicos embonaron con mucha facilidad, proporcionando la atmósfera deseada por el director, por lo que, a pesar de la duración de la cinta, el dinamismo creado por la imagen y sonido (además de la trama) hacen pasar de manera muy rápida esa dos horas y media.

Algo digno de mencionar, es la participación de Karen O, extrovertida integrante de la banda neoyorquina Yeah Yeah Yeahs, quien presta su voz para hacer una versión muy a la Reznor, de la canción Immigrant Song, original de los legendarios Led Zeppelin. Una pieza muy bien versionada en lo que el ex integrante de Nine Inch Nails sabe hacer con maestría.

Un material vasto, pero sin caer en los excesos. A pesar de sonido industrial que predomina en toda la banda sonora, éste se combina en muchos de los temas con líneas melódicas más digeribles que otorgadas por algunos pianos y sintetizadores, manteniendo un buen equilibrio a lo largo de los distintos tracks.

Aún parece funcionar esta mancuerna de compositores, pero si Fincher será quien dirija la secuela de esta cinta y Reznor y Atticus vuelven a ser los encargados de la música, sin duda alguna tendrán que exigirse más para dar algo nuevo y distinto que ofrecer, tanto al filme como al público que disfruta de su colaboración. Estoy casi seguro de que no fallarán.

Por Antonio Millán (@ias_caboti)

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