Santa Bárbara (2022) cuenta la historia de una mujer latinoamericana que lleva 12 años viviendo en Barcelona, trabajando como empleada doméstica para una familia en su hogar y de igual forma en una tienda de muebles, mientras vive con su novia y pasa sus fines de semana jugando fútbol en una liga femenina amateur latinoamericana, además de aprovechar sus ratos libres para divertirse con sus amigas y su pareja mientras disfruta de una libertad que anteriormente no tuvo.
Como parte de sus obligaciones siendo una jefa de familia a distancia, la protagonista llama por teléfono a su madre en su país de origen todos los sábados para poder saludar a sus dos hijos, a quienes no ve desde que emigró a España buscando tener una mejor economía, ya que ella debe sacar adelante a sus familiares. En una de esas llamadas que hace semanalmente, Bárbara (interpretada por Anabel Castañón) recibe la inesperada noticia de parte de su madre de la detención de su hijo mayor por las autoridades, razón por la cual ya no está dispuesta a cuidarlo y lo que provocará que la vida de ella dé un giro completo al verse obligada a recibir a su hijo.
Lo primero que llama la atención sobre esta película es que tiene cierto aire de cine documental por su manera de mostrar la cotidianeidad de su protagonista y la forma en la que se relaciona en su círculo cercano, al mismo tiempo que muestra un fenómeno de migración de países latinos a España por falta de recursos económicos, que también causa la separación de las familias, una especie de despertar a la vida al tener lo que no se tenía y la manera en la que ciertas personas pueden percibir a sus familiares en el extranjero simplemente como una fuente de ingresos económicos.
Ese efecto como de documental que puede percibirse al ver este filme se debe a que su génesis está precisamente en el hecho de que Anaïs Pareto Onghena, la directora, se preparó con la intención de crear un documental en el momento que conoció a un grupo de mujeres latinoamericanas en una liga de fútbol en España, lo cual le llevó a conocer de cerca sus historias mientras comenzaba a plantearse el hacer una ficción con sabor a documental sobre una mujer migrante latinoamericana que trabaja en un país que no es el suyo para mantener a una familia con la cual está desconectada, al mismo tiempo que intenta vivir libremente debido a que nunca había podido gozar de libertad para realmente hacer lo que quisiera.
Con un claro efecto realista y un tono íntimo, esta cinta toca de manera acertada temas que son del día a día para millones de mujeres migrantes alrededor del mundo y logra retratar una situación por la que muchas personas pasan, además de que logra ofrecer una perspectiva de la maternidad que resulta diferente a la que estamos acostumbrados a ver y vivir, ya que aquí nos dejan ver cómo a veces las madres pueden preferir alejarse en beneficio de vivir sus vidas a su manera, pero en este caso sin dejar de lado sus responsabilidades para con sus hijos, adoptando así el modelo de la maternidad a distancia que a muchas puede funcionarles, pero que no deja de ser algo difícil.
Santa Bárbara es un buen ejercicio cinematográfico a través del cual se muestra una realidad de nuestros tiempos que es necesario conocer mejor, es una película honesta que deja pensando al espectador y ofrece un punto de vista interesante sobre la maternidad.
Por Jonathan Eslui (@JonathanEslui)