En Mapa (2012), el director León Siminiani relata la historia de su primera película y que dio pie a que ésta naciera. Una crónica al amor no correspondido en primera persona.
Después de ser despedido de su empleo en televisión, Siminiani decide viajar y recorrer la India, con la esperanza de hacer su ópera prima. Ahí se sentirá como un paria, no logrará conectar con la gente e iniciará un extenso diálogo con su Yo interno. Una voz caprichosa que lo cuestiona, lo hostiga y lo ayuda a reflexionar sobre su situación.
Con el paso de los días, el realizador notará que aquello que busca no es un debut cinematográfico, sino el recuerdo de una chica: Luna. Jornada tras jornada su necesidad por estar con la mujer idealizada se incrementará, hasta que decide regresar a España para entablar una relación con ella. La felicidad es efímera…
Uno de los objetivos de Distrital: Cine y otros mundos es proyectar cintas que no encuentran un espacio masivo de distribución y que propongan narrativas diferentes a las que inundan la cartelera de los cines comerciales.
Mapa cumple con esas dos características, es casi imposible que se programe de manera comercial en cines y su narración en primera persona rompe con lo tradicional.
La ópera prima de León Siminiani funciona como un extenso diario de viaje –de vida, podríamos decir–, sobre un hombre errante que busca darle sentido a su existencia.
El interés del público por lo que ve en pantalla dependerá de qué tan abiertos y dispuestos esté a entrar en el juego del realizador español. Estará subordinado al grado en que puedan relacionarse con su situación y que tan certeras piensen que son sus reflexiones. Sin duda, no es un juego para todos.
Por Rafael Paz (@pazespa)
