La historia de Dheepan gira en torno a un guerrero Tamil, una casta de Sri Lanka, llamado Erran, quien huye a Francia, donde termina trabajando como cuidador en las afueras de París. Ése es el fresco donde Jacques Audiard desarrolla su película. La cinta se presentó en la Competencia Oficial del Festival de Cannes y fue recibida con agrado, aunque no con tanto entusiasmo como Nie yin niang (The Assassin) de Hsiao-Hsien Hou. Lean las reacciones:
Jerome Vermelin, Metro News París: “Oscilando finamente entre el melodrama, la crónica social y el thriller, Dheepan es un filme a la vez fuerte y dulce, magnético y bello como los rostros de sus actores principales. Su historia de amor, que nace entre un campo de ruinas y que es sellada en el caos de un final a la Peckinpah, no termina por conmover. Bien podríamos, sin embargo, hacerle una reverencia y otorgarle la consagración que merece en Cannes.”
Oliver Lyttelton, The Playlist: “Obviamente se ve y se escucha genial: la impresionante fotografía, del debutante Eponine Momenceau, da como resultado algunas de las imágenes más memorables del festival, mientras que el score del artista de electrónica Nicolas Iaar es excelente. Se trata de Audiard operando en condición optima, dejando de lado los artificios de De óxido y hueso para hacer incisivos estudios de carácter y una visión del mundo profundamente humana y cálida, siendo una de las lumbreras de la competencia este año.”
Andrew Pulver, The Guardian: “De muchas maneras, el material no es novedoso: audiencias británicas podrían remitirse a cosas como Dead Man’s Shoes o Harry Brown, ambos de los cuales presentan personas que solían ser militares usando sus habilidades en una zona urbana de conflicto. Pero Audiard posee un lirismo que hace destacar su filme, incluso en la sangrienta confrontación final. Dheepan esta tan interesada en la acreción de detalle, entendiendo lo que hace a la unidad familiar funcionar, como en los rituales de combate callejero –aunque, como lo demostró antes, es muy bueno para eso también. Puede no tratarse del filme más electrizante del cineasta, pero de manera sutil, se trata de un trabajo poderoso.”
Fabien Lemercier, Cineuropa: “Casi en sordina, sobre una línea de inquietud mantenida con gran pulso, la película se embala en sus escenas finales convirtiéndose en una especie de salvaje western moderno, pero antes, es paradójicamente el tratamiento muy superficial del tema de las bandas de delincuentes, algo que sorprende en la mirada de Audiard, más bien cercana generalmente a la profundidad y el detalle. La cinta es pues un reajuste sobre la gestación de la familia, que ve al cineasta, como a su personaje principal, intentar escapar de su naturaleza propia sin conseguirlo por completo.”
Luis Martínez, El Mundo: “De nuevo, la cámara se mueve nerviosa entre los cuerpos buscando su vibración más interna. Y, otra vez, como ya hicieron en cualquiera de sus trabajos anteriores, Audiard se las arregla para colocar el patio de butacas en el centro del universo narrado. Bien es cierto que la película, aún manteniendo las constantes del director, no alcanza la fiereza de sus mejores logros. Pero es igual, ‘Dheepan‘ es un ejercicio enfebrecido donde los personajes se mueven al límite de su angustia. Habría merecido un lugar más vistoso, sin duda.”
