No es precisamente una sorpresa ver a George Clooney defendiendo a Sony Pictures Entertainment y su controvertida película The Interview. El hackeo a Sony y las amenazas de una célula ligada al gobierno norcoreano supone un ataque no sólo a la libertad de expresión y de empresa, sino a los Estados Unidos mismos, aunque la Casa Blanca ya se tardó en emitir una respuesta.
Clooney lanzó un comunicado en el que expresó su preocupación por el asunto y un espaldarazo a Sony. “Apoyamos la decisión de Sony de no someterse a las demandas de estos hackers”, dice el pronunciamiento. Sin embargo, Sony, como quien dice, ya se dobló, pues no estrenará la cinta en ningún formato, al menos por lo pronto.
En entrevista con Deadline, Clooney dijo que los estudios no deben ceder, pero nadie lo ha apoyado en su petición de enfrentar a los hackers y apoyar a Sony. La industria, cree Clooney, tiene miedo. Ello podría llevar a una mayor dificultad de distribución para las cintas independientes e implica una limitación para los cineastas estadounidenses, quienes ahora deberán someterse aun gobierno que ni siquiera es el suyo.
El tema es bastante delicado y quién sabe hasta qué nivel podría alzarse, pero dada la tibieza de Obama, tampoco creemos que vaya muy lejos. Eso tampoco es decir que la solución ideal sea invadir Pyonyang, pero al menos debería haber una respuesta. Los mantendremos informados del futuro de The Interview.
